Precios y pagos

Cuando compres bienes o servicios en la UE, tienes que recibir información clara sobre el precio total, incluidos todos los impuestos y recargos.

En las compras por internet, debes reconocer explícitamente —por ejemplo, pulsando un botón— que eres consciente de que hacer un pedido entraña la obligación de pagar.

Advertencia

Si quieres hacer un pago online por un importe superior a 30 EUR, deberás utilizar una combinación de al menos dos elementos de autenticación:

  • algo que tengas (un móvil o un lector de tarjetas) Y algo que te aprendas (un código PIN o una contraseña)
  • algo que tengas (un móvil o un lector de tarjetas) Y algo personal (huella digital)
  • algo que te aprendas (un PIN o una contraseña) Y algo personal (huella digital).

Los pagos son así más seguros y están mejor protegidos.

Recargos: tasas por la utilización de tarjetas

En la UE un vendedor no puede cobrarte más por utilizar una tarjeta de crédito o de débito. Las únicas excepciones a esta norma son las tarjetas American Express / Diners Club y las tarjetas de empresa o corporativas, ya que se factura a la empresa en lugar de a los particulares. Si utilizas ese tipo de tarjetas, pueden cobrarte un recargo, pero este no puede ser superior al coste real que el vendedor asuma por el tratamiento del pago.

Debes tener en cuenta que si pagas en una divisa de la UE distinta del euro, es posible que la entidad emisora de la tarjeta te cobre una comisión por conversión de moneda si utilizas la tarjeta en otro país de la UE.

Servicios en línea «gratuitos»

Los servicios en línea gratuitos tienen un coste: tus datos personales son valiosos, por eso los servicios web y las aplicaciones gratuitas los recopilan. Según la normativa de la UE, tienes derecho a saber cómo se almacenan y utilizan tus datos personales. También debes conocer los detalles del contrato, como el tipo de servicio «gratuito» que recibirás, la duración del contrato, información sobre el derecho de desistimiento y las condiciones de resolución del contrato.

De conformidad con la normativa de la UE, tienes un derecho explícito a recibir información precontractual y un derecho de desistimiento de catorce días. Esto se aplica también a las situaciones en las que no hayas pagado un precio o una tasa pero hayas facilitado al vendedor datos personales que no eran directamente necesarios para el servicio (por ejemplo, el consentimiento para la recopilación de datos de comportamiento para fines publicitarios).

Estos derechos de protección de los consumidores se suman a la normativa de protección de datos personales que regula la recopilación y el uso de los datos personales de los consumidores.

Caso concreto

No facilites más datos de los necesarios

Daniel, de Francia, busca una herramienta en línea para convertir sus archivos PDF en documentos editables. Encuentra una aplicación aparentemente fiable, pero para completar la conversión de documentos se le pide que se suscriba al servicio, facilitando su correo electrónico e información personal de todo tipo. Al no estar claro qué implicaría la suscripción, Daniel decide no seguir adelante.

Como consumidor, tienes derecho a obtener información precontractual clara y comprensible acerca del servicio, así como a desistir de cualquier servicio en un plazo de catorce días sin justificación ni coste alguno.

Gastos por servicios adicionales

Para cualquier pago adicional solicitado por el vendedor, como entrega urgente, empaquetado para regalo o seguro de viajes, debes dar tu consentimiento.

Las empresas no pueden cobrarte por esos servicios a no ser que los elijas expresamente. La utilización de casillas preseleccionadas en la web del vendedor no constituye un consentimiento expreso y tienes derecho al reembolso de todos los pagos que hayas efectuado así.

Caso concreto

El vendedor debe informar del precio completo (incluidos los recargos y las tasas) antes del pago

Ewa, ciudadana polaca, compra unos libros en una tienda online, pero esta carga a su tarjeta de crédito un importe mayor que el anunciado en su web. Ewa se da cuenta entonces de que la empresa no había incluido los gastos de envío y de que los añadió después de realizar la compra.

Las normas europeas obligan a los vendedores a informar a los clientes de los precios correctos y completos antes de la compra. Ewa comunica tanto a la empresa como a las autoridades polacas lo ocurrido y estas se encargan de garantizar que se le restituya lo que ha pagado de más.

Pagar en otra moneda: gastos de conversión

Al comprar un producto o servicio cuyo precio se haya establecido en otra moneda, además del precio de venta tendrás que pagar una cantidad extra. Del mismo modo, si sacas dinero de un cajero automático en otra moneda, tendrás que pagar más que la cantidad retirada. Los costes adicionales pueden incluir:

  • una comisión por transacción en el extranjero que cobre tu banco o la entidad emisora de tu tarjeta (si no pagas en euros o no retiras euros en efectivo)
  • una comisión por cambio de divisa
  • la comisión que cobre la entidad propietaria del cajero.

Cuando hagas una compra, en persona o por internet, es posible que te ofrezcan la opción de pagar en la moneda local o en la moneda de tu país. Si pagas en la moneda local, tendrás que esperar hasta que recibas el extracto de tu cuenta bancaria o la factura de la tarjeta de crédito para saber el coste de la transacción en la moneda de tu país. Esta es, a menudo, la opción más económica. Si pagas en la moneda de tu país, sabrás inmediatamente cuánto te van a cobrar. Con frecuencia, las comisiones adicionales hacen que esta opción resulte más costosa.

Si un comerciante o un sitio web te ofrece la opción de pagar en la moneda de tu país, tiene que informarte exactamente del coste añadido que eso supondrá, expresado como recargo porcentual en relación con los últimos tipos de cambio del Banco Central Europeo.

Ejemplo: supongamos que un hotel te ofrece la posibilidad de elegir entre pagar por tu estancia en la moneda local o en la moneda de tu país. Si eliges la moneda de tu país, el hotel debe convertir el importe de la factura utilizando el tipo del BCE e informarte del recargo porcentual que aplicará.

Los sitios web de tu banco o de la entidad emisora de tu tarjeta también deben proporcionarte información sobre este tipo de comisiones. En cualquier caso, siempre puedes desechar esa posibilidad y hacer el pago en moneda local.

Discriminación en cuanto al precio

Como ciudadano de la UE o residente en la UE, no pueden cobrarte un precio más alto por comprar productos o servicios a causa de tu nacionalidad o tu país de residencia.

Cuando compras productos online en la UE los precios pueden variar de un país a otro o entre las diferentes versiones de la misma web, por ejemplo debido a diferencias en los gastos de envío. No obstante, si tus compras online no prevén un envío transfronterizo, como cuando compras algo por internet que tienes intención de recoger personalmente en un comercio o una tienda, debes tener acceso a los mismos precios y a las mismas ofertas especiales que los compradores que viven en ese país de la UE. No pueden cobrarte más ni impedirte comprar algo por el mero hecho de vivir en otro país.

Las mismas normas se aplican cuando compras servicios prestados en el establecimiento del vendedor (por ejemplo entradas para un parque de atracciones, reservas de hotel, alquiler de coches) o servicios prestados por vía electrónica (servicios en la nube o alojamiento de sitios web). En esos casos tienes derecho a acceder a los mismos precios que los compradores locales.

Advertencia

Los medios de comunicación protegidos por derechos de autor, como películas, libros electrónicos y música, suelen estar cubiertos por acuerdos de licencia diferentes según los países. Por lo tanto, es posible que no siempre tengas acceso a los mismos productos al mismo precio en todos los países de la UE.

Caso concreto

No te pueden cobrar más tan solo por tu país de residencia

Hilda, de nacionalidad danesa, quiere reservar un vehículo de alquiler en España durante sus vacaciones de verano. Elige el coche en la web de una empresa española de alquiler de automóviles. Sin embargo, al introducir su dirección para finalizar la reserva, observa que el precio total por el alquiler del coche se ha encarecido en 140 EUR.

Hilda se pone en contacto con su Centro Europeo del Consumidor local para quejarse sobre esta discriminación de precios y allí la ayudan a presentar una denuncia oficial, relacionada con la discriminación de precios practicada en la web de la empresa de alquiler de automóviles. Como la empresa no ha respetado las normas de la UE, puede ser sancionada por la administración nacional competente.

Normas sobre los precios de billetes de viaje

Las normas de la UE sobre precios también se aplican al comprar billetes de viaje, por ejemplo, de avión o tren, ya sea por internet o en persona. Esto significa que cuando compras los billetes, todos los impuestos, tasas y recargos deben estar incluidos y figurar en el precio total desde el inicio del proceso de reserva. Así te resultará más fácil comparar los precios con otros operadores de viajes.

Cualquier suplemento opcional (como el seguro de viaje) debe figurar claramente como tal y ofrecerse exclusivamente a título voluntario.

Cuando compres billetes de avión, si crees que el precio que aparece en internet al reservar un vuelo es poco claro, puedes comunicarlo a las autoridades nacionales en de tu país de residencia en la UE.

Redireccionamiento automático a un sitio web

Si existen varias versiones de la web de un vendedor, no puedes ser redirigido automáticamente hacia otra versión de la web sin tu autorización. Por ejemplo, si vives en Francia y has elegido ir directamente a un sitio web .be (Bélgica), el vendedor puede sugerirte que consultes la versión .fr de su web. No obstante, si no das tu permiso explícito para ese redireccionamiento, tienes que poder acceder al sitio .be que elegiste inicialmente.

También deberías poder modificar tu elección en todo momento, por ejemplo mediante una casilla de «selección del país». Eso te permite ver los precios y las promociones de los productos y los servicios ofrecidos por ese vendedor en otros países. No obstante, debes leer siempre atentamente las condiciones de venta para comprender las opciones y gastos de envío aplicables en tu país.

Preguntas frecuentes

Más información

Legislación de la UE

¿Necesitas recurrir a los servicios de asistencia?

Ponte en contacto con los servicios de asistencia especializados

Última comprobación: 07/11/2022
Compartir esta página