EUR-Lex Access to European Union law

Back to EUR-Lex homepage

This document is an excerpt from the EUR-Lex website

Estrategia comunitaria contra la resistencia a los antimicrobianos

La presente Comunicación tiene por objeto presentar una visión global del fenómeno preocupante que representa el incremento de la resistencia a los antimicrobianos en las personas y los animales.

ACTO

Comunicación de la Comisión, de 20 de junio de 2001, relativa a una estrategia comunitaria contra la resistencia a los antimicrobianos [COM (2001) 333 final, Volumen I - no publicada en el Diario Oficial].

SÍNTESIS

Contexto

Las sustancias antimicrobianas son sustancias sintéticas o naturales utilizadas para matar o inhibir el crecimiento de virus, bacterias, etc. (los antibióticos son agentes antimicrobianos que sólo actúan contra las bacterias). No cabe duda de que estas sustancias han permitido mejorar la salud de la población. No obstante, algunos microorganismos han desarrollado una resistencia a dichos agentes debido a una utilización excesiva e incontrolada que pone en peligro los avances médicos realizados.

Estamos ante un fenómeno mundial preocupante, por lo que la Comisión ha decidido presentar una visión global para completar y reforzar la legislación existente. La Comunicación va acompañada de una propuesta de Recomendación sobre la utilización prudente de los agentes antimicrobianos en la medicina humana.

Objetivos específicos

Hay que señalar que no sólo estamos expuestos a los agentes antimicrobianos a través de los medicamentos, sino también a través de la alimentación. Lo mismo puede decirse de los animales. La estrategia afecta por tanto a la medicina humana y veterinaria e incluye acciones prioritarias en cuatro áreas clave:

  • vigilancia: realizar un seguimiento de la evolución y los efectos de las intervenciones;
  • prevención de las enfermedades transmisibles y control de las infecciones a fin de reducir la necesidad de utilización de agentes antimicrobianos; esto incluye el uso prudente de estos agentes;
  • investigación y desarrollo de productos alternativos;
  • cooperación internacional.

Área 1: vigilancia

Se apoya en dos acciones prioritarias:

  • desarrollar las redes de vigilancia a nivel europeo y promover la participación de terceros países;
  • establecer y mejorar la recopilación de datos sobre el consumo de agentes antimicrobianos en todos los sectores.

Con respecto a las redes de vigilancia, ha de observarse no solamente la resistencia a los antimicrobianos sino también la evolución de las enfermedades transmisibles, las infecciones como la salmonera y las infecciones contraídas en hospitales (las infecciones nosocomiales), etc. Los focos de enfermedad pueden constituir un signo de resistencia a los antimicrobianos. En 1999 ya se creó a nivel comunitario una Red de vigilancia epidemiológica y de control de las enfermedades transmisibles. Las redes específicas creadas en este contexto son numerosas e incluyen al EARSS (Sistema europeo de vigilancia de la resistencia a los antimicrobianos). Hay que mejorar estas redes para que sean más coherentes y estén mejor coordinadas. Hay también redes similares en el ámbito de la medicina veterinaria.

Área 2: prevención

Se prevén varias acciones clave en materia de prevención:

  • reforzar la importancia de la información sobre la resistencia a los antimicrobianos en el proceso de autorización de la comercialización en todos los ámbitos;
  • realizar a nivel comunitario campañas de sensibilización destinadas a los profesionales y a la población para evitar la utilización excesiva y abusiva de estos agentes;
  • asegurarse de que las sustancias antibacterianas se distribuyan sólo con receta en la medicina humana y veterinaria, y bajo control en la agricultura, y establecer si esta norma debería extenderse a todos los agentes antimicrobianos;
  • reforzar y promover los programas de prevención de las infecciones, en particular los de vacunación;
  • reforzar los métodos de análisis, las sanciones y los procedimientos de notificación del sistema de vigilancia de los productos alimenticios;
  • eliminar progresivamente y sustituir los agentes antimicrobianos utilizados como factores de crecimiento en los alimentos para animales (esta acción ya se ha iniciado en parte sobre la base de la legislación existente o propuesta);
  • reexaminar la utilización de los dos agentes antimicrobianos utilizados en la alimentación humana (los agentes conservantes nisina [E 234] y natamicina [E 235]);
  • conceder especial atención a los OMG que contienen genes que muestran una resistencia a los antibióticos utilizados para tratamientos médicos o veterinarios, a fin de identificar y eliminar dichos genes de los OMG si tienen un efecto nocivo para el medio ambiente y la salud humana.

Área 3: investigación y desarrollo de productos

Se prevén tres acciones clave en este ámbito:

  • fomentar el desarrollo de nuevos agentes antimicrobianos;
  • favorecer el desarrollo de tratamientos y vacunas sustitutivas;
  • apoyar el desarrollo de pruebas de diagnóstico y susceptibilidad rápidas y fiables.

La investigación comunitaria sobre la resistencia a los antimicrobianos tiene ya varios años y se realiza sobre todo en el marco del Programa marco comunitario de investigación y desarrollo (actualmente está en curso el Quinto Programa marco 1998-2002).

Área 4: cooperación internacional

Este fenómeno no respeta las fronteras; efectivamente, el aumento de los intercambios comerciales y de los viajes en todo el planeta ha incrementado la velocidad de propagación. La Comunidad ha creado por ello vínculos importantes con muchas organizaciones internacionales, entre ellas la OMS. Ha incluido también las acciones en este ámbito en sus foros de cooperación externa, tales como la cooperación Euro-med y la dimensión septentrional, y en el proceso de ampliación de la Unión Europea.

Las dos acciones prioritarias en este ámbito son las siguientes:

  • fomentar en gran medida el desarrollo, la cooperación y la coordinación a escala internacional;
  • conceder especial atención a los países candidatos y a los países en vías de desarrollo ayudándoles a establecer las estructuras apropiadas.

ACTOS CONEXOS

Recomendación del Consejo, de 15 de noviembre de 2001, sobre la utilización prudente de los agentes antimicrobianos en la medicina humana [COM (2001) 333 final, Volumen II -no publicada en el Diario Oficial]. Esta Recomendación es continuación de la Comunicación de 2001 relativa a una estrategia comunitaria contra la resistencia a los antimicrobianos. Tiene por objeto contener la extensión de la resistencia a los antimicrobianos y mantener, por tanto, la eficacia de estos agentes.

Resolución del Consejo, de 8 de junio de 1999, sobre la resistencia a los antibióticos «Plan de prevención de la amenaza microbiana» [Diario Oficial C 195 de 13.7.1999].

Esta Resolución tiene por objeto establecer una estrategia común y una acción coordinada para combatir la resistencia a los antibióticos.

Última modificación: 26.05.2006

Top