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Producción de electricidad sostenible a partir de combustibles fósiles

En esta Comunicación, la Comisión evalúa el modo y el coste de producción futura de electricidad a partir de combustibles fósiles para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero correspondientes.

ACTO

Comunicación de la Comisión, de 10 de enero de 2007, «Producción sostenible de electricidad a partir de combustibles fósiles: conseguir centrales eléctricas de carbón con emisiones próximas a cero después de 2020» [COM (2006) 843 final - no publicada en el Diario Oficial].

SÍNTESIS

La utilización a gran escala de combustibles fósiles (petróleo, gas natural, carbón) constituye la causa principal de origen humano del cambio climático por las emisiones de CO2 resultantes. El sector de la producción de electricidad representa un porcentaje importante de esas emisiones y es muy probable que esta tendencia vaya en aumento.

En efecto, en la Unión Europea (UE), más del 50 % de la electricidad se produce a partir de combustibles fósiles, principalmente del carbón, que representa un 30 % aproximadamente de la producción de electricidad total de la UE. Para contribuir a la seguridad del suministro energético de la UE, el carbón seguirá ocupando un puesto esencial en las fuentes de energía utilizadas. Las emisiones de CO2 derivadas de la producción de electricidad a partir de carbón ascendieron en 2005 a un 70 % del total de las emisiones de CO2 procedentes de la producción de electricidad en la UE, lo que representa un 24 % de las emisiones de CO2 de todos los sectores.

Estas fuentes de energía, y en particular el carbón, van a ser cada vez más importantes en la producción de energía de determinadas regiones del mundo en las próximas décadas (especialmente en China y en la India) por el aumento significativo de la demanda de energía.

Por consiguiente, es fundamental que la UE establezca de inmediato el marco para desarrollar y difundir las tecnologías que le permitan utilizar de forma sostenible el carbón, es decir, de limitar las emisiones de CO2 procedentes de la utilización del carbón para la producción de electricidad.

Las mejoras conseguidas en las tecnologías del carbón (aumento de la eficiencia energética, disminución de las lluvias ácidas y de las situaciones de contaminación atmosférica local debidas a las emisiones de SO2, de NOx y de partículas) demuestran que son posibles avances tecnológicos significativos, especialmente mediante el principio de la captura y almacenamiento del carbono.

Tecnologías de combustibles fósiles sostenibles

Las tecnologías de carbón sostenible serán el resultado de una combinación óptima de las técnicas del «carbón limpio» (mejora del rendimiento y disminución de las emisiones atmosféricas) y de las técnicas de captura y almacenamiento de CO2. El perfeccionamiento de estas tecnologías y la demostración de su viabilidad comercial permitirán su difusión a gran escala.

Para ello es necesario un fuerte aumento de los fondos asignados a la investigación, que permita el desarrollo de proyectos de demostración tecnológica, a escala tanto nacional como comunitaria. Debe garantizarse una cooperación periódica entre el sector industrial y las autoridades públicas, especialmente mediante una estructura de coordinación y apoyo que se inspire en la Plataforma tecnológica para centrales eléctricas alimentadas por combustibles fósiles con emisiones cero, inaugurada en el año 2006. La Comisión estudiará las demás medidas adecuadas que conviene adoptar a corto plazo en materia de demostración.

Deberán aplicarse las mejores técnicas disponibles cuando se renueve el parque de centrales eléctricas de carbón utilizadas en la UE, lo que debería permitir reducir en un 20 % las emisiones de CO2 procedentes de las centrales de carbón de aquí al año 2020. La Comisión evaluará si se recurre efectivamente a las mejores técnicas disponibles y contemplará, si procede, la adopción de instrumentos jurídicamente vinculantes para fomentarlo.

Marco favorable para estas tecnologías

La UE ha de disponer de un marco normativo y económico favorable para las tecnologías de baja emisión de CO2, que garantice a largo plazo el recurso perenne a las tecnologías de carbón sostenible, a fin de favorecer las inversiones y la transición a esas tecnologías.

Así pues, la Comisión aboga por:

Por otra parte, la Comisión considera que las nuevas centrales de carbón deberían construirse con sistemas de captura y almacenamiento de CO2 de aquí al año 2020 y que las centrales existentes deberían adaptarse a las normas de forma progresiva. Podrían establecerse medidas incentivadoras (por ejemplo la adopción de objetivos jurídicamente vinculantes o la creación de centros comunes de almacenamiento).

Además, la UE seguirá promoviendo a escala internacional la celebración de un acuerdo para limitar el aumento de la temperatura a 2 °C por encima de los niveles preindustriales, y en este contexto una de las opciones será la captura y el almacenamiento de CO2. La UE apoyará la modificación de determinados acuerdos y convenios internacionales para reducir los obstáculos a las tecnologías que permiten la captura y almacenamiento del carbono (por ejemplo, en el subsuelo marino).

Costes y beneficios de las tecnologías sostenibles para los combustibles fósiles

La construcción de nuevas centrales adaptadas a la captura y almacenamiento del carbono no debería suponer necesariamente costes complementarios, aunque la construcción de centrales para la demostración a escala industrial de las tecnologías de carbón sostenible sí requerirá recursos financieros importantes, así como la adaptación a partir de 2020 de las centrales existentes.

Hoy en día, las tecnologías de captura y almacenamiento del carbono siguen siendo demasiado caras para una utilización a gran escala. Sin embargo, las mejoras técnicas de los próximos años y los beneficios derivados de la captura y almacenamiento del CO2 deberían limitar el aumento del coste de la electricidad procedente de centrales que recurran a esas tecnologías en 2020 a un 10 % con respecto a los niveles actuales, e incluso compensar totalmente dichos costes. Además, el posible aumento del coste de la electricidad producida por centrales de carbón no debería repercutir, al menos íntegramente, en los precios de la electricidad para los consumidores.

En cuanto a los efectos negativos para el medio ambiente, la Comisión considera que los riesgos de la captura y almacenamiento del carbono proceden ante todo de posibles fugas. El Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (GIEC), sin embargo, ha llegado a la conclusión de que la proporción de CO2 retenida en reservas geológicas adecuadamente seleccionadas y gestionadas supere muy probablemente el 99 % en un período de 100 años.

La utilización sostenible de combustibles fósiles, especialmente mediante la captura y el almacenamiento del CO2, permitirá eliminar hasta un 90 % de las emisiones de carbono producidas por las centrales eléctricas de combustibles fósiles, lo que representa una reducción global del 25 al 30 % de las emisiones de CO2 en la UE de 27 Estados miembros de aquí al año 2030 en comparación con los niveles del año 2000. Por otra parte, el recurso a las tecnologías adecuadas permitirá reducir simultáneamente los contaminantes atmosféricos relacionados con la combustión tradicional del carbón, entre otros los NOx y el SO2, lo que daría lugar a una disminución de los costes ambientales locales y de los costes sanitarios.

Además, si la UE obtiene resultados suficientes a escala internacional en el desarrollo de las tecnologías sostenibles para los combustibles fósiles, su liderazgo le permitirá crear empleo y exportar su tecnología, con el consiguiente efecto de arrastre positivo para los terceros países. Para ello se desarrollará una estrecha cooperación, tecnológica y comercial, con los países usuarios de carbón, entre los que figuran China, los Estados Unidos y la India, así como los países en desarrollo.

Contexto

Esta Comunicación es parte del «paquete sobre energía» publicado por la Comisión en enero de 2007, que define una nueva política energética europea y en el que se establecen objetivos cuantificados.

ACTOS CONEXOS

Comunicación de la Comisión, de 10 de enero de 2007, sobre una política energética para Europa [COM (2007) 1 final - no publicada en el Diario Oficial].

Esta Comunicación constituye la piedra angular del paquete de medidas presentadas por la Comisión en enero de 2007 («paquete sobre energía»). Tras pasar revista a los retos de Europa en materia de energía, especialmente el cambio climático y la seguridad de suministro de la UE, la Comisión especifica varias acciones relacionadas, entre otros puntos, con el mercado interior de la energía, la seguridad del suministro, la eficiencia energética, las fuentes de energía renovables, las tecnologías energéticas y la política energética internacional.

Comunicación de la Comisión, de 10 de enero de 2007, « Limitar el calentamiento mundial a 2 ºC - Medidas necesarias hasta 2020 y después» [COM (2007) 2 final - no publicada en el Diario Oficial]. En esta Comunicación, la Comisión recuerda los costes y beneficios de la lucha contra el cambio climático y defiende varias medidas para limitar el calentamiento del planeta a 2° C. Algunas se aplican a la Unión Europea (objetivo vinculante de reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero, adopción de medidas energéticas, entre otras) y otras tienen un alcance internacional (en particular, negociación de un acuerdo internacional).

Libro verde de la Comisión, de 8 de marzo de 2006, «Estrategia europea para una energía sostenible, competitiva y segura» [COM (2006) 105 final - no publicado en el Diario Oficial]. Con este Libro Verde, la Comisión desea plasmar una auténtica política energética europea frente a los numerosos desafíos en lo que se refiere al suministro y a los efectos para el crecimiento y el medio ambiente de Europa.

Última modificación: 17.04.2007

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